


La universidad de Zaragoza pretende eliminar 1200 plazas con la aprobación de los nuevos grados.
Hoy viernes 4, se acaba el plazo para presentar alegaciones a los nuevos grados, que pese a la oposición de una gran parte del estudiantado y resto de la comunidad universitaria, supone un paso más en la consolidación de un modelo mercantilizado de educación.
Desde la Asamblea Contra la Privatización de la Universidad (ACPU) queremos mostrar nuestro rechazo a estos nuevos planes, que suponen una muestra clara de hacia dónde se pretende que avance el modelo universitario; un modelo en el que la reducción de plazas se usa como filtro para lograr una elitización.
Pese a que estos planes son modificables en base a las alegaciones que se hayan presentado, vemos como la sombra de la elitización planea sobre la universidad, con casos flagrantes como el de derecho, que pretende reducir a la mitad sus plazas (pasando de 365 a 180), es decir, aspira a no dejar matricularse a 180 estudiantes nuevos (derecho a contado este año con 360 nuevos estudiantes). Pero esa no es la única facultad que decide reducir plazas que están ampliamente cubiertas. La recién estrenada Facultad de Ciencias Sociales y del Trabajo (antigua Escuela Universitaria de Estudios Sociales) ambiciona reducir más de 100 plazas el nuevo grado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos, es decir, dejar a 84 estudiantes sin poderse matricularse, mientras que si se hubieran podido matricular en la antigua diplomatura.
Pero esta reducción de plazas no es algo particular de la rama de ciencias sociales y jurídicas, donde se pretenden suprimir 550 plazas sino que es similar en casi todas las ramas.
En la rama de artes y humanidades desaparecen 325 plazas; en la rama de ciencias se eliminan 125 plazas; y en la de ingeniería y arquitectura se harán desaparecer 220 plazas.
Solamente la rama de ciencias de la salud gana alguna plaza, gracias a la implantación del grado en logopedia.
Por todo lo anterior y por la fuerza que nos da el ver como en los planes de estudio se nos da la razón y ratifican nuestros argumentos (texto de abajo), donde se confirma el carácter generalista de muchos grados y la necesidad de un máster para alcanzar la formación deseada. También se informa de la estrecha vinculación al mundo empresarial. Por todo ello la ACPU continuara su trabajo de información y difusión contra este plan mercantilista.
Extracto del Plan de estudios de Grado de Ingeniería en Tecnologías Industriales
"Este grado (...) por su carácter multidisciplinar e integrador de todas las tecnologías industriales y su amplia base formativa polivalente y generalista. Estas características, junto a su estrecha vinculación empresarial, le auguran una excelente empleabilidad con alta capacidad de resolución, innovación y adaptación a los retos que se le planteen en su ejercicio profesional.
Asimismo, este Grado proporcionará al estudiante las bases científicas y tecnológicas con las que podrá abordar de forma eficiente los estudios específicos conducentes al título de Máster en Ingeniería Industrial, que son su continuación natural"
En primer lugar ha intervenido Héctor Martínez, estudiante de la ACPU, que ha leído los resultados del referendum:
88% a favor de la paralización, 11% en contra de la paralización y 1% de blanco o nulo. Estos datos los ha interpretado de la siguiente manera:
“Las conclusiones que podemos sacar de estos resultados: que la paralización de bolonia es lo que más apoyos tiene en toda la historia de la universidad de zaragoza. No ha habido nunca ningún colectivo o candidatura del rector que haya tenido tanto apoyo como la paralización de bolonia, y esto ha ocurrido en todas las universidades españolas donde se han realizado referendums o consultas.
La participación ha sido la segunda más alta de toda la historia, en concreto tiene un 50% más de apoyos que la candidatura del rector de la Universidad de Zaragoza”
Por nuestra parte le hemos pedido al Rector la paralización de Bolonia y que como representante de la UZ haga caso de lo que dicen sus representados, ejerciendo de representante de verdad.
Además hemos expuesto otras razones que conducen a la moratoria, porque
· Los grados que se están haciendo son una chapuza, se están haciendo de tapadillo y otra vez a oscuras.
· Y por la financiación, porque no hay dinero para contratar a más profesorado.
La respuesta del equipo rectoral es que seguirán adelante, aunque tengan en frente a la comunidad universitaria y se esté haciendo mal.”
En cuanto a las nuevas vías de acción de la ACPU Héctor Martínez ha declarado que:
“Hemos utilizado todas las vías posibles, la información, la difusión, la legítima protesta… nos acusaron de no tener representación y que no teníamos por lo tanto legitimación. Entonces apostamos por su vía, la electoralista y la de los votos. Ahora que ya lo hemos hecho y hemos conseguido más votos que ellos se siguen negando al diálogo. Ya sólo nos queda la huelga.”
Por su parte José Antonio Turégano, profesor del CPS, ha declarado que Bolonia
“representa una quiebra de la legitimidad democrática mínima y que en otras universidades como Francia, Italia y Alemania ya se ha demostrado que esto es un fracaso. La máscara de Bolonia se cae, por ejemplo, al leer la declaración firmada por una docena de rectores franceses:
El proceso de Bolonia significa una mercantilización de la enseñanza que convierte al estudiante en un cliente y a la universidad en una empresa de servicios.”
Nieves Cuadras, profesora de la Facultad de Educación, ha declarado al respecto de la autonomía universitaria que
“La pérdida de autonomía económica implica pérdida de autonomía de pensamiento. Además se están implantando modelos de gestión que funcionan a base de directivas y la excusa es siempre la misma: aquí viene de Madrid y en Madrid dicen que viene de Europa.”
La participación supera también las eleccion es al claustro1, pero con menos diferencia.
El 12 de mayo de 2009 se celebró en la Universidad de Zaragoza un referendum sobre el Espacio Europeo de Educación Superior,
fruto de las exigencias planteadas por la Asamblea Contra la Privatización de la Universidad al rectorado de esta Universidad. Con este referendum se pretendía dar voz de una vez a lxs estudiantes, quienes han sido constantemente apartados del debate y demostrar que la postura mantenida por la ACPU no era minoritaria. A la pregunta de sí ¿Estás de acuerdo con la paralización de la implantación del Espacio Europeo de Educación Superior para abrir un debate sobre el futuro de la Universidad Pública? El 87,7% dijo sí.
Este referendum, que “sólo” costó 108 días de encierro, ha sido organizado por los estudiantes de la UNIZAR. En las mesas se sentaron principalmente delegados de centro o clases para garantizar la ausencia de críticas. La UNIZAR habilitó espacios, censos, papeletas, urnas y mobiliario, así como cobertura informática y legal. La campaña a favor de la paralización, autogestionada por la ACPU, ha tenido un coste económico de 72,21€, aunque algún examen sin duda se verá penalizado por la falta de tiempo.
Una abrumadora mayoría ha votado a favor de la paralización del proceso de Bolonia, con una participación que ha superado aquella que eligió al actual rector. En concreto la participación ha alcanzado un 11.82%, o lo que es lo mismo, se han emitido un 3622 votos. Al actual rector le votaron 2081 estudiantes frente a los 3179 que han dicho sí a la paralización2
La jornada por otra parte se ha desarrollado sin incidentes y dentro de la normalidad habitual, a pesar del boicot de algunos colectivos de estudiantes. En particular EDU y algunos delegados anunciaron su desvinculación del referendum y rechazo a lo que las urnas expresasen, pues erigiéndose en representantes legítimos del estudiantado no necesitaban consultar nada a nadie. Cabe destacar también algún incidente provocado con los censos proporcionados por la UNIZAR, especialmente con los de estudiantes de doctorado, que hubo que revisar cuatro veces, impidiendo la sana participación de estxs.
Por parte del rectorado solo cabe esperar que se posicione sobre este referendum, aunque la experiencia de la ACPU en este tema indica que no se tomará muy en serio la opinión democráticamente y legítimamente expresada por el estudiantado. Aunque más estudiantes hayan votado por la paralización de Bolonia que por su candidatura, estamos segurxs que siempre habrá alguna peregrina excusa, falsedad o mentira que aducir.
El estudiantado se ha pronunciado.
Votos | Porcentaje | |
censo | 30648 | |
emitidos | 3622 | |
validos | 3616 | |
sí | 3179 | 87,77 |
no | 403 | 11,13 |
blanco | 36 | 0,99 |
nulo | 4 | 0,11 |
% participación | 11,82 |
Algunos datos parciales:
Algunas facultades se han demostrado especialemente combativas contra Bolonia:
En la FAC CC SALUD Y DEPORTE, en Huesca, el 40% de los estudiantes participaron en la consulta, expresándose en contra el 92%.
En la Facultad de Filosofía y Letras el 94% se pronunció a favor de la paralización de Bolonia.
Los resultados más ajustados tuvieron lugar en la EUPLA (La Almunia): 64% a favor de la paralización, 33% en contra.
ZAR | |||
EU TURISMO | % | ||
censo | 383 | ||
emitidos | 58 | ||
validos | 58 | ||
sí | 48 | 82,76 | |
no | 9 | 15,52 | |
blanco | 1 | 2,08 | |
nulo | 0 | 0 | |
% participación | 15,14 |
OTRA BOLONIA ES POSIBLE
Las resistencias que una parte del alumnado ha planteado frente al Plan Bolonia han tenido el efecto positivo de hacer visible un tema que había pasado desapercibido no sólo para la sociedad en general sino, incluso, y lo que es más grave, para la propia Universidad. Sólo la falta de tradición democrática de la sociedad española, y el alto nivel de desmovilización de la misma, pueden explicar la atonía del debate social y político, incluso en un estamento, como es la Universidad, en el que se presume que la capacidad analítica y crítica debe alcanzar un alto nivel. Los estudiantes tienen el mérito de haber provocado que la Universidad despierte levemente del sueño de la razón, que, como todos sabemos, produce monstruos. Desde un compromiso con la necesaria reforma de la Universidad, sus enseñanzas y métodos pedagógicos que contribuya a la adecuación de la institución a las realidades históricas y sociales del siglo XXI, no podemos sino manifestar nuestra preocupación y malestar ante la implantación del llamado Plan Bolonia. El actual planteamiento del proceso de Bolonia presenta una serie de elementos que nos parecen suficientemente preocupantes como para llamar la atención sobre los mismos.
A ello conviene sumar lo que se vislumbra en el fondo del proceso: un riesgo evidente de privatización de la gestión y de mercantilización de la universidad pública, hecho éste que ya se percibe en tres planos diferenciados pero obviamente imbricados y coherentes entre sí:
- En primer término, la penetración del capital privado mediante cátedras de empresa carentes de una estricta normativa reguladora, con claro efecto condicionante sobre las líneas de investigación, ya que impulsan las que le resultan más rentables (aprovechando la barata y/o gratuita mano de obra de becarios y estudiantes) y provocan, de rebote, el abandono de proyectos que, siendo más provechosos para la sociedad en general, no generan tantos beneficios económicos para las corporaciones.
- En segundo lugar, la identificación perniciosa entre intereses "empresariales " y "sociales" que otorga al "mercado" la capacidad absoluta para incidir, no sólo en el diseño de los máster, sino incluso en los planes de grado. Determinadas empresas y entidades externas a la universidad se arrogan la capacidad de dictar qué conocimiento es útil o inútil, aspecto éste especialmente grave en el caso de algunas titulaciones de humanidades. Se nos intenta hacer creer que es lo mismo lo que interesa a la sociedad que lo que interesa a las empresas y, con el pretexto de romper una supuesta urna de cristal, se fuerza una apertura unidireccional que supone realmente dar la espalda al resto de la sociedad, un todo complejo en el que conviven muy diversos intereses. Así, en un mundo cada vez más mercantilizado, se intenta anular el mecanismo ordenador y de denuncia que puede suponer una universidad pública con real autonomía en la investigación. Hoy pueden verse ya algunos de estos efectos negativos en las áreas más sensibles: desarrollos farmacéuticos, generación de semillas o energías renovables.
- Por último, la generalización de una metodología, un discurso y una práctica que constituyen otra vuelta de tuerca en la colonización del ámbito educativo por el lenguaje y las formas empresariales. La terminología misma resulta sintomática: al ya muy utilizado “recursos humanos”, se añaden las “competencias”, el “espíritu emprendedor”, la competitividad entre universidades, como si se tratara de mercado de libre concurrencia.
Con Bolonia también se establece una nueva metodología docente, en la que se pretende una mayor implicación del alumnado en su proceso formativo. No diremos que esto nos parezca negativo, lo que ocurre es que los procedimientos que se arbitran conducen en la dirección contraria. Se habla de incentivar la autonomía del estudiante, reduciendo las horas lectivas y dotándole de estrategias de acceso al conocimiento por su propia cuenta. Sin embargo, al mismo tiempo, se pautan todos sus gestos, indicándole cuándo debe ir a la biblioteca (y cuantas horas) y a cuántas conferencias debe asistir, con lo que, en realidad, en lugar de la planteada autonomía, se estipula con mayor precisión qué es lo que debe hacer el alumno. En un proceso muy semejante al que se ha dado en secundaria, lo que se hace es coger al estudiante de la mano y guiar todos sus pasos. Al mismo tiempo, se le exige el sobresfuerzo de tener que encontrar él lo que al profesor le ha podido costar años de dedicación. Si bien es positivo proporcionarle instrumentos para adquirir autonomía, no se entiende muy bien por qué privarle de un acceso rápido al conocimiento a través del profesorado, cuando ambas estrategias no se oponen, sino que se complementan. En todo caso, empujarle a la autosuficiencia sin las adecuadas herramientas y medios que optimicen su esfuerzo es lanzarle a un fracaso sin paliativos.
Por otro lado, se estipula una duración de los grados de cuatro años que, por un lado, no coincide con el diseño europeo, y, por otro, de manera arbitraria y un tanto incomprensible, hace disminuir un año a unas carreras, aumenta un año a otras y a unas terceras las deja igual. En algunos casos, al acortamiento de las carreras a cuatro años, se une un primer curso de grado de carácter generalista, de contenidos muy rebajados, lo que va a suponer un descenso de los conocimientos de los graduados, por menor duración y menor nivel de la enseñanza. En estos casos, y en los de las carreras que se mantienen en cuatro años, para aumentar el conocimiento se deberá a recurrir a los máster, lo que, objetivamente, encarece el estudio. Un encarecimiento evidente en aquellos que pretendan enfocar sus pasos hacia la docencia en secundaria, pues con el nuevo modelo deberán cursar un máster específico, de plazas reducidas y elevado coste, que restringirá el acceso a la función docente, tanto por las plazas ofertadas desde el máster como por el coste de las mismas, muy superior a lo que actualmente cuesta el curso que da acceso a la docencia (CAP). No dudamos de la necesidad de suprimir el CAP, pero no parece que el camino más adecuado sea el de un máster que posee los mismos defectos que dicho curso. A ello habrá que añadir el efecto destructivo que tendrá sobre los másteres en investigación, con los que entra en abierta competencia.
Al cobijo del proyecto se pretende definir un estatuto del profesorado claramente lesivo, denunciado por todos los sindicatos, y unos procedimientos de evaluación de la calidad, a través de la ANECA, que están siendo puestos en cuestión por buena parte de la comunidad universitaria.
Todas estas razones son las que nos hacen mostrar nuestras discrepancias con el actual desarrollo del proceso de Bolonia. Insistimos en que ello no supone, más bien todo lo contrario, el rechazo a un necesario proceso de reforma universitaria y de convergencia europea en el ámbito de la educación. Precisamente, manifestamos nuestra preocupación porque lo que se presenta como convergencia europea no es tal, ni siquiera en la duración de los estudios, y porque, con la excusa de dicho proceso se introducen, sin ningún tipo de debate o participación, medidas de acompañamiento de carácter docente, laboral y evaluador que consideramos lesivas para los intereses de la universidad del futuro. Por todo ello, y especialmente en un momento en el que la crisis económica repercutirá, sin ninguna duda, en las instituciones universitarias, reclamamos un amplio debate, participativo y de abajo a arriba, en el que se diagnostiquen los problemas e insuficiencias de la universidad en sus diferentes aspectos y se arbitren, consensuadamente, las medidas precisas para su solución..
Porque creemos que Otra Bolonia es posible.
Hoy, miércoles 25 de marzo, la Asamblea Contra la Privatización de la Universidad (A.C.P.U) hemos decidido encerrarnos en el Rectorado de la Universidad de Zaragoza.
Con este encierro queremos mostrar nuestro rechazo a las brutales represiones que han sufrido nuestros compañeros en distintas ciudades como por ejemplo en Baleares, en Barcelona, donde más de un centenar de personas resultaron heridas a causa de la brutal carga policial; por ello exigimos un posicionamiento público por parte del rectorado condenando la represión ejercida contra el movimiento estudiantil.
Asimismo denunciamos que el talante represivo del PSOE que ha ido en aumento durante los últimos meses cuando él hace pocos años se posicionaba a favor de este movimiento y en contra de la LOU, que a día de hoy sigue vigente.
Queremos hacer pública la actitud hipócrita del rectorado quien sólo habla de diálogo con presencia de público o cámaras delante, pero en realidad, es la Asamblea la que ha dado los pasos necesarios para que este diálogo se lleve a cabo, mientras que el equipo rectoral incumple todos los acuerdos que presentaban las bases para que este se lograse.
Denunciamos que la Conserjería de Educación de la DGA esta reduciendo deliberadamente la financiación de la Educación Superior pública, al igual que ha hecho con la Sanidad, para facilitar la entrada de capital privado procedente de las empresas y hacer competitivos a los prestadores privados.
El Gobierno de España está aplicando Bolonia de la misma forma el Gobierno del PP aplicó la LOU en sus mejores tiempos, no apreciamos ninguna diferencia entre ambos gobiernos puesto que ambos no dudan en implantar a golpes aquellas políticas beneficiosas para las empresas que han llevado a la sociedad a la ruina.
ACPU como el resto de Asambleas del Estado sólo quiere dar a conocer la realidad del Plan Bolonia a toda la comunidad universitaria para que esta pueda decidir por si misma de forma consciente, por ello, convocamos al rector a un debate público el próximo 29 de abril, el cual exigimos que llegue a toda la sociedad.
Queremos denunciar a falta de democracia dentro de la Universidad de Zaragoza ya que funciona como un organismo estamental impropio del S.XXI y más propio del s.XIII, por ello y con la legitimidad que nos da haber recogido más firmas apoyando nuestras reivindicaciones que votos tuvo el actual rector, creemos necesario que se haga un ejercicio de higiene democrática convocando un referéndum sobre la implantación del Espacio Europeo de Educación Superior.
Más de 30 colectivos universitarios, sindicatos, partidos y asociaciones de vecinos apoyan las reclamaciones y peticiones de la Asamblea
La ACPU quiere desmentir los rumores que indican que abandonará el encierro tras la manifestación: en ningún caso vamos a abandonar el encierro, ya que éste se ha mostrado como una herramienta válida para la autoformación, la información al resto de los compañerxs y como herramienta p
ara visualizar la protesta. De hecho, al final de la manifestación, se convocó al resto de estudiantes a una asamblea para que puedan participar con nosotrxs de forma activa.
Por otro lado la ACPU valora positivamente la mayor afluencia de profesorado y PAS a esta convocatoria, lo que unido al manifiesto que han hecho circular algunos profesores criticando el Proceso de Bolonia, en el cual además rechazan la mercantilización que este trae consigo; nos hace pensar que pronto contaremos con más apoyos
. Apoyos que por cierto acabarán por invalidar de una vez para todas la insultante teoría de que si estamos contra el Plan Bolonia es porque no lo hemos entendido o porque protestamos por el mero hecho de protestar. Esta forma de tratarnos, infantil antes que nada, queda también expuesta al comparar la situación con otros estados vecinos como Italia o Francia. En este último las manifestaciones y huelgas universitarias están siendo seguidas de forma mayoritaria y se ha paralizado la educación desde la maternal hasta la universitaria.
La ACPU establecerá sus nuevas estrategias y actuaciones en una próxima asamblea de valoración.
Estos docentes, entre los que destacan 113 catedráticos y profesores titulares, son críticos con el llamado proceso de Bolonia, que debe llevar a la creación de un espacio único europeo de educación superior, y denuncian que las autoridades no han consultado suficientemente con la comunidad educativa.
El manifiesto, titulado "Contra el desmembramiento de la universidad pública. El PDI (personal docente) y el PAS (personal no docente) ante el Proceso de Bolonia", ha sido leído hoy en un acto organizado en el vestíbulo de la Universitat de Barcelona (UB), por el catedrático de filología de la UB, Jordi Llovet,
A juicio de los firmantes, la implantación de Bolonia "es una imposición que no ha contado con los agentes implicados" y que se está abordando "sin que se haya hecho un auténtico diagnóstico del estado actual de las universidades", por lo que creen que no sirve para hacer frente al "deterioro" de la educación superior en España.
"En estos momentos, lo que se puede afirmar irrefutablemente es que se está desmantelando la universidad pública, que se está supeditando el funcionamiento a los dictámenes del mercado y que se está desperdiciando el conocimiento en la medida en que es tratado como una mercancía", afirma el escrito.
Algunos de los catedráticos y titulares que lo firman son Jordi Arcarons, de Econometría de la UB; Joan Bestard, de Antropología Social de la UB; Josep Maria Català, de Comunicación Audiovisual de la UAB; Manuel Delgado, de Antropología de la UB; Josep Muntañola, de la UPC; Salvador Oliva, de Filología de la Universitat de Girona; AnaGaray, de Psicología Social de la UAB, o Manuel Cruz, de Historia de la Filosofía de la UB.
Los firmantes lamentan que se utilice "un tono cada vez más autoritario" para intentar convencer de que Bolonia permitirá avanzar al conocimiento científico, además de la compatibilidad de titulaciones y la movilidad de estudiantes en Europa.
Por contra, alertan: "nadie dice que bajo una reconversión docente y pedagógica (...) se nos sustrae a los protagonistas de la vida universitaria la posibilidad de reflexionar lúcidamente sobre las decisiones que se están tomando y las consecuencias que tendrán en la configuración de la universidad pública".
Estos profesores universitarios denuncian que los órganos de gobierno de las universidades han optado por utilizar "el descrédito" para rechazar los argumentos antiBolonia y por "criminalizar" a los estudiantes.
Los firmantes aplauden el "coraje estudiantil" por haberse movilizado contra Bolonia, ya que consideran que estas protestas "han sacado las críticas y reflexiones que hasta ahora sólo existían en los pasillos (...) a un debate abierto"·
"El coraje estudiantil (...) ha agitado la pasividad de muchos de nosotros, que hemos decidido salir de nuestro aislamiento y, de manera colectiva, involucrarnos activamente ante los retos de futuro que la universidad debería afrontar si quiere hacerlo con responsabilidad", añaden.
Llovet ha pedido hoy que se abran comisiones de debate en cada una de las universidades públicas en las que estén representados todos los sectores -profesores, personal de administración, estudiantes y rectorado- y que las conclusiones sean elevadas al Comisionado y después a la Generalitat y, si es necesario, al Gobierno español.
Aunque en el manifiesto los profesores no piden ninguna moratoria del Plan Bolonia, la apertura de un proceso de debate como el que proponen tendría que comportar seguramente esta paralización, medida que el claustro de la UB ya rechazó taxativamente la semana pasada.
De momento, los firmantes del escrito llaman a la comunidad educativa a participar en la manifestación antiBolonia que los principales sectores estudiantiles contrarios a este plan han convocado en Barcelona para el jueves, 12 de marzo.
Además, se ha emplazado todos a un encuentro el próximo sábado, 14 de marzo, en la UB para definir actuaciones de futuro.
"Sin no actuamos ya la degradación de toda la educación, desde la universitaria hasta la secundaria y la primaria, está servida", ha dicho Llovet.
Preguntado sobre el encierro que mantienen desde hace tres meses un grupo de estudiantes en el edificio histórico de la UB, Llovet ha pedido que no se ponga el énfasis en este hecho que no ve más que como "un elemento estético y aparatoso".
http://www.adn.es/sociedad/20090310/NWS-1563-Trescientos-Bolonia-universitarios-movilizacion-profesores.html
LUNES 16
Charla - Coloquio: Plataforma contra el capitalismo y la exclusion social.
MARTES 17
Charla - Coloquio: Colectivo Zapatista del Alto Ebro + Plataforma de solidaridad con Chiapas
MIERCOLES 18
Charla - Coloquio: Represaliados durante el franquismo: Mariano Viñuales y Miguel Galindo.
JUEVES 19 - VIERNES 20
Encuentro de Estudiantes Encerrados contra el Plan Bolonia.
SABADO 21 - DOMINGO 22
Encuentro estatal de Asambleas en Burgos
MIERCOLES 25
Taller de desobediencia civil. Giorgos Karamanlis (griego represaliado durante 2007 en la universidad de Atenas)